"El pleno de hoy queda suspendido pero no desconvocado. El pleno de investidura del candidato Carles Puigdemont i Casamajor se mantiene convocado y se celebrará una vez que aseguremos un debate de investidura efectivo y con garantías porque esta es la voluntad expresada por los grupos parlamentarios. También se pospone para garantizar el derecho del president Puigdemont a un debate de investidura efectivo y sin injerencias, una investidura que tenga valor real y que sea efectiva".

Con estas palabras y antes de las 10 de esta mañana, el president del Parlament catalán, Roger Torrent, suspendía el pleno de investidura presidencial de Carles Puigdemont, convocado para las 15 horas y justificaba su decisión para permitir que el Tribunal Constitucional (TC) "deshaga la chapuza".

Este sábado, el TC respondía un recurso presentado por el gobierno español en el que se impugnaba la investidura de Carles Puigdemont como president de la Generalitat de Catalunya. Después de 6 horas de intensas discusiones entre los magistrados del TC y de llamadas telefónicas, tanto de la vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaria, como del propio presidente, Mariano Rajoy, el TC resolvió que Puigdemont podía ser investido, no sin antes cumplir con ciertas condiciones: que el candidato sea investido de forma presencial y previa autorización judicial. 

El TC, también decía que no admitía a trámite el recurso del gobierno español y que se daba 10 días para hacerlo, esperando las alegaciones de las partes. "En ese sentido, he instado a los servicios jurídicos de la cámara a que el Parlament se persone y formule alegaciones  a lo dicho por el TC y atendiendo a la petición del president de garantizar su derecho a un debate de investidura con garantías, y a su vez para dar tiempo a las alegaciones presentadas por el mismo president", decía Torrent esta mañana.

A las 14:00 horas y luego de reunirse durante una hora, el TC contestaba la alegación presentada por Puigdemont y le decía que  todo continuaba igual, que sus derechos no estaban siendo vulnerados y que sólo podría ser investido de manera presencial y con la autorización judicial.

Según arguye el gobierno español en el recurso presentado, Puigdemont no puede ser investido porque tiene una orden de búsqueda y captura en territorio español, sin embargo, hasta el momento, no hay orden de detención en contra del candidato en todo el territorio español. Dejó de haberla cuando el juez del TS anuló la Euroorden cursada a Bélgica pidiendo la extradición de Puigdemont. Lo que hay es una orden de apercibimiento por no haber acudido a la citación del Tribunal Supremo (TS).

Así las cosas, Puigdemont podría ser conducido por la policía ante el juez para declarar. La reclusión en prisión -preventiva- sólo podría ser ordenada por el juez luego del interrogatorio de rigor. Por otro lado, se ha de considerar el derecho del candidato a la inmunidad parlamentaria establecido en la propia Constitución española.

Artículo 71: Durante el período de su mandato los Diputados y Senadores gozarán de inmunidad y sólo podrán ser detenidos en caso de flagrante delito. No podrán ser inculpados ni procesados sin la previa autorización de la Cámara respectiva".

Minutos después de la respuesta del TC, Elsa Artadi, portavoz de Junts per Catalunya -el partido del expresident- manifestaba que ellos y los parlamentarios de la CUP, otra de las fuerzas independentistas, no habían sido consultados por el president del Parlament para la suspensión del pleno y manifestaban que este tenía todas las garantías para ser realizado y que TODOS los parlamentarios estaban presentes para poder realizarlo.

Se busca

¿Se refería Elsa Artadi a que Carles Puigdemont estaba en la sede del Parlament? No lo sabemos, sin embargo, de ser esto cierto sería una bofetada a Juan Zoido, el ministro del Interior español, quien hace unos días declaró en una entrevista que a Puigdemont lo buscaban por tierra, mar y aire expertos oficiales de la Guardia Civil (GC) y la Policía Nacional (PN). 

"Trabajamos para que Puigdemont no pueda acceder al Parlament, expertos de la GC y la PN trabajan de manera muy intensa mañana tarde y noche para que eso no suceda, y aunque es verdad que la frontera a cubrir es muy extensa, que no sólo hay grandes vías que la penetran y que son más fáciles de controlar, sino que hay muchos caminos rurales que se puede entrar a través de helicópteros, que se puede entrar con un ultraligero, que se puede entrar por barco, nosotros estamos trabajando para que eso no pueda pasar y que la legalidad, sea la que impere en España". (Juan Zoido dixit)

"España debe de ser el único Estado del mundo que teme y se prepara para la eventual invasión de un solo hombre". Este tuit retrata perfectamente la nueva paranoia del Ministerio del Interior español, encontrar al diputado Carles Puigdemont, al que buscan hasta bajo las cloacas del Parlament catalán.

Desde hace más de una semana Puigdemont es buscado hasta en el sistema de alcantarillado que rodea el Parlament. Este lunes, una mujer envió un audio de whatsapp a una amiga: "Esta mañana saliendo del departamento de mi novio, que vive cerca al Parlament, me subí a la moto para ir a trabajar y un policía salió de la alcantarilla que tenía al lado, me vió y se volvió a meter".

Este lunes alerta máxima en un aeródromo español, aterrizaba una avioneta procedente de Bélgica y el enemigo podía estar dentro, rápidamente la policía se apersona, revisa hasta las alas de la nave y sólo encuentra una española, dos belgas, un ruso y alguien más, pero, Carles Puigdemont el hombre más buscado del momento, NO. Esto da hasta para hacer un chiste de aquellos que todos conocemos.

¿Y qué dicen los especialistas?

La respuesta dada por el TC al recurso presentado el sábado por el gobierno español, ha sido cuestionada por juristas españoles y catalanes pues impone medidas cautelares que nadie le ha pedido, y no dice si admite a trámite, o no, el recurso presentado por el gobierno, sobre el cual -además- tiene un mínimo de 5 meses para pronunciarse. 

Además el recurso presentado por el gobierno había sido desaconsejado por el Consejo de Estado. Soraya Sáenz de Santamaria, vicepresidenta del gobierno español, en total actitud "Minority Report", pidió un informe a este órgano para presentar  la impugnación de la candidatura de Carles Puigdemont ante el TC, la respuesta fue que no se podía actuar sobre algo que aún no había ocurrido.

Oh qué será, qué será

Esta no es la primera vez que utilizó este subtitulo para un artículo referente al proceso catalán y es que ahora deberemos esperar a ver qué pasa, ningún analista es capaz de predecir nada, algunos dicen que nos vamos a nuevas elecciones, otros que Puigdemont podría dejar la candidatura para que otro sea investido president y él nombrado algo así como primer ministro y que gobernase desde el exterior, cualquier otro escenario lo sitúa dentro de un prisión, y según su abogado sería por un periodo de 42 años. 

Por ahora la oposición celebra la suspensión de pleno de investidura y Mariano Rajoy ha dicho en una entrevista a la radio que ahora sólo queda que el president del Parlament proponga a otro candidato, que sea una persona sin problemas con la justicia y que se comprometa en cumplir con la legalidad española, o sea, que escoja a alguien que acepte todas las imposiciones de un gobierno cuyo partido tiene sólo 4 parlamentarios en la cámara catalana. 

Todo está abierto, nada está dicho, delante del Parlament cientos de manifestantes se mantienen con máscaras de la cara de Puigdemont gritando "ni un paso atrás" y algunos de los Comités de Defensa de la República dicen que se mantendrán allí hasta que el pleno de investidura se realice.

Amenazas

Dentro de lo que está ocurriendo es necesario mencionar que en la NO resolución del TC, se le señalaba al president del Parlament que si permitía la investidura telemática de Carles Puigdemot se exponía a una querella judicial. Pero esta no es la única amenaza hecha a Torrent. Pablo Casado, portavoz de comunicación del PP, dijo este lunes que el president del Parlament "tiene dos hijos y sabe lo que le espera"

Esta no es la primera vez que Casado amenaza a un representante del independentismo. Antes de declarar la independencia de Catalunya el 27 de octubre pasado, Casado le advirtió a Puigdemont que tenga cuidado al declarar la independencia, no sea que acabase como el president Lluis Companys, ejecutado por el dictador Francisco Franco luego de proclamar la república catalana a principios del siglo XX.

Sin embargo, ante las amenazas, que algunos han calificado de mafiosas, el president del Parlament no arruga. "Llegaré hasta el final para defender los derechos de todos los diputados y de los ciudadanos porque la democracia no puede suspenderse, ni violentarse". En la suspensión del pleno de investidura Torrent también dijo: "no aceptaré ni que el Gobierno español, ni el TC violen los derechos de los diputados" [...] "no se le puede decir a los catalanes que han votado mal porque no han votado como quería el gobierno español" [...] "El pueblo catalán se respeta", concluyó.